«Las perspectivas turísticas para Formentera son -para Paul Wenham, gerente del Patronat Municipal de Turisme de Formentera-, como mínimo iguales a las de 2002». Wenham señaló, asimismo, que «esperar de 2003 mejores resultados es casi imposible dado como fue la temporada pasada» ya que la crisis económica de uno de los principales mercados emisores, el alemán, no tiene visos de haber tocado fondo por lo que recuperar el porcentaje de turistas perdidos es, cuando menos, difícil.

En este sentido Carmen Tur, del Patronat, ha remarcado que recientemente en la feria alemana de Colonia «fue sumamente satisfactorio ver el grado de conocimiento de Formentera por parte de la gente que se acercó a nuestro stand»; en este sentido, destacó que se trata de un tipo de clientela que «repite destino cada año porque se sienten muy a gusto en esta isla».

Wenham, tras afirmar que por lo que se refiere a la oferta legal «la temporada alta está toda vendida desde hace meses», no descartó que pudieran torcerse las excelentes espectativas para 2003 por cuanto «hay una serie de aspectos coyunturales entre los que cabe destacar una posible guerra en Irak que puedem hacer variar notablemente la disposición de la gente a viajar a según qué destinos». Para el gerente del Patronat Municipal de Turismo, una guerra en el Golfo Pérsico no tiene por qué afectar mucho, señalando que, en todo caso, lo que podría suceder sería un efecto inverso, es decir que turistas que pensaban ir a países próximos a la zona del conflicto, como Turquia que es un mercado competidor con Balears, podrían decidir ir a destinos más alejados y tranquilos como Balears.