El Sindicato de Enfermería (Satse) zanjó su crisis interna tras la
renuncia de la representante de Eivissa, Teresa Muñoz, que abanderó
una recogida de firmas en protesta por la homologación salarial. El
sindicato, con mayoria en Can Misses, decidió nombrar a Anabel
González como representante de Satse en las Pitiüses.
La recogida de firmas que comenzó en Eivissa marcó el punto de
inflexión del sindicato. «Tuvimos una reunión en Palma y se decidió
hacer las cosas consensuadas. Somos el Satse de Balears, Eivissa y
Menorca actúan con mucha independencia pero si hay que tomar una
medida sobre algo con lo que estás en desacuerdo, pero que ha
firmado el sindicato, pongámonos de acuerdo», explicó Dolores
Calderón, que estuvo ayer en Eivissa.
En su opinión, el acuerdo de homologación es muy bueno para el
sector de enfermería, pero «la administración ha sido «muy poco
ética y estética, ya que a quien no había que homologar había que
hacerle una subida para que no hubiera diferencias». Ante esta
situación, Satse demanda su presencia en una mesa de subida
salarial por lo que ha comenzar a recoger firmas en Balears. «En
noviembre entregué más de mil firmas en el IB-Salut para apoyar la
enfermería», sostiene Calderón.
Sin embargo, ya había diferencias. «La versión que se dio en
Eivissa es que, además de la homologación, se le han subido a las
auxiliares y a los médicos. Se formó todo el follón», explicó
González, que estuvo a punto de darse de baja, pero cambió de idea
asumiendo el cargo de representante de Eivissa. «Somos un colectivo
grande y qué mejor que la enfermería para luchar por nuestros
derechos» dijo.
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