Saludar a las autoridades pitiusas y conocer las instalaciones del
Ejército de Tierra fue el motivo que trajo ayer a Eivissa al
general de división y reciente comandante general de Balears, Luis
Peláez-Campomanes. El militar hizo mención al inminente
desmantelamiento de los batallones de infantería de Eivissa y
Menorca, antes de final de año, y al futuro que depara a las
instalaciones militares.
Con respecto a la más importante, la base de Sa Coma, en el
futuro permanecerá «como unidad de apoyo a la proyección», que debe
estar preparada para recibir fuerzas procedentes de otras unidades
de la península «que vendrán ha hacer ejercicios y maniobras». El
comandante anunció incluso que la base ibicenca está incluida
dentro de unas maniobras militares que realizarán fuerzas
internacionales de la OTAN en octubre de 2003 en las Illes Balears.
«Hay que recordar que las unidades españolas colaboran día a día
con las fuerzas aliadas», remarcó.
En lo que respecta a la dirección de asistencia al personal, las
dos residencias con las que cuenta «continuarán estando a
disposición de familias de los militares para que pasen sus
vacaciones». En trámite de desafectación quedan otras dos unidades:
la antigua Comandancia Militar de Eivissa, en es Soto, y el
polvorín de Santa Gertrudis.
«Será el Ministerio de Defensa el que decida cual será el uso
futuro para ambos emplazamientos, de acuerdo con los organismos que
estén interesados», señaló. Si no hay un organismo público
interesado se contempla la posibilidad de que pase a manos
privadas. Con respecto al uso de sa Coma por parte de la Guardia
Civil mientras se derriba y construye el nuevo cuartel,
Peláez-Campomanes se mostró encantado porque «las relaciones son
extraordinarias».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.