GUILLERMO ROMANÍ El Consell ha denegado la autorización de electrificación de 24 viviendas situadas en las zonas Can Isabel, Ca na Costa y Sa Roqueta mediante un proyecto de soterramiento de línea de alta tensión encargado por los vecinos de la zona a Eléctrica Mibesa y que contaba con un presupuesto cercano a los 200.000 euros.

Las razones aducidas por Carreteras son que «de acuerdo con el artículo 33.3.e de la Llei 5/90 de Carreteres de la CAIB (...) sólo se podrán autorizar conducciones soterradas de interés público a más de tres metros de la arista exterior de la explanación, fuera de la zona de dominio público». Sin embargo, y esa es la queja de los vecinos que se sienten discriminados por el Consell, no se tiene en cuenta de que en un tramo de poco más de 100 metros, la carretera discurre entre s'Estany Pudent y ses salines den Marroig, no existe un margen mínimo y continuado de tres metros en ninguno de los dos lados de la vía, ya que a ambos lados está el agua, bien del circuito de circunvalación de s'Estany Pudent, bien los estanques salineros den Marroig, lo cual imposibilita un soterramiento a la distancia exigida.

El proyecto pretendía efectuar el soterramiento a medio metro del borde de la carretera guardando una distancia paralela a la misma, circunstancia que no ha aceptado la Conselleria insular de Xarxa viària, que pretendía, para la electrificación un tendido aéreo zigzagueante que, partiendo de la estación transformadora de Salinera Española, cruzaba en diversas ocasiones la carretera. El tramo conflictivo, el de competencia del Consell, es de apenas 500 metros, los que van desde la estación transformadora hasta la entrada de Sa Roqueta ya que a partir de ahí el soterramiento se aleja en perpendicular de la carretera. Con dicho proyecto al que inicialmente se habían sumado 24 viviendas, que al final podrían acabar siendo unas 40, beneficiaría asimismo a la zona de Sa Roqueta ya que se soterrarían por completo las líneas eléctricas de la zona.