El Àrea de Salud de Eivissa y Formentera contestó ayer a las críticas del Sindicato Médico sobre la reserva de plaza en el servicio de Urgencias de Can Misses de la actual gerente, María Àngeles Leciñena, asegurando que se trata de una «práctica habitual de todas las gerencias y no es reprobable ni ilegal ni éticamente». El portavoz del Sindicato Médico, Nacho Fernández, sostiene sin embargo que «el estatuto jurídico dice que cuando te dan un cargo de confianza se puede pedir una excedencia, pero eso es para médicos que tienen la plaza en propiedad y no interinos, como Leciñena. Me parece que no es ético».

A través de un comunicado de prensa, ante la ausencia de la gerente, el Àrea de Salud expresa su sorpresa por las críticas «ya que no se tiene constancia de manera oficial». Entiende que los sindicatos no siempre han de compartir las decisiones de la Gerencia «pero no comprende el supuesto clima de crispación que el sindicato asegura que existe en algunos servicios médicos, especialmente porque se está trabajando para solucionar los problemas que la sanidad pública». En cuanto a las listas de espera, el IB-Salut afirma que «las listas de espera y la actividad de cada servicio es resultado de la gestión que hace cada servicio con la dirección y ambos estamentos la conocen sin necesidad de disfrazarla».

Recuerda que se han consolidado las plazas laborales para todo el personal del Àrea de Salud y se han incrementado las plantillas de personal facultativo en Otorrinolaringología, Nefrología y Urgencias. Precisamente, el Sindicato Médico asegura que hay malestar en estos tres servicios. «El ambiente está muy tenso», afirma Fernández. Respecto a Urgencias, el problema se encuentra en los cambios de turnos que se negocian. «Han de trabajar seis de cada diez fines de semana, cuando ahora son tres y ya son bastantes».

Las medidas de la gerente han ocasionado malestar entre sus antiguos compañeros. Fernández asegura que las tensas relaciones con Leciñena se han abordado en la junta de personal. «Hay que saber dialogar, negociar y tener tacto. En lugar de eso, tenemos los hechos consumados».