S on las 10:30 horas de la mañana, hace un sol espléndido y sería un día perfecto para ir a la playa... Los últimos días de playa. Sin embargo, muchos jóvenes, exactamente 106 ibicencos, han cambiado la playa por una de las pruebas más importantes de su vida: las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU). Ahora mismo acaban de salir del primer examen, Lengua y Literatura, y durante la media hora de descanso que tienen las preguntas que más formulan son: «¿Cómo te ha ido?» y «¿Qué tal?», sin duda, dominan el ambiente. Unos dicen que mal, otros que «ha sido menos chungo que en junio» y los más atrevidos que «al menos ya está hecho». Hay respuestas para todos, pero todos están metidos en el mismo barco y con el mismo objetivo: aprobar la selectividad.

Marina Santos y Antuanet Safar son dos amigas residentes en Sant Antoni. Ambas han sido de las primeras en salir del examen y coinciden en que la prueba les ha ido mal. «Yo es que no me lo había mirado mucho porque mis padres me dijeron que me presentara para probar suerte. De todos modos, no necesito aprobar porque quiero estudiar un módulo de Administración y Finanzas», explica Marina mientras va dando algunas ojeadas a sus apuntes de catalán, el próximo examen. Mientras, su compañera Antuanet lo tiene más difícil, ella quiere estudiar Medicina «pero ya no será hasta el año que viene porque me dejaron sin plaza», comenta un poco indignada.

Emilio Oliveras, por el contrario, ha salido un poco más animado del examen. «No ha sido tan difícil como me pensaba. Pero la verdad es que lo llevaba muy mal, con sacar un cuatro me conformo. Ahora, sin embargo, me toca el de catalán que lo llevo bastante bien porque he hecho todas las lecturas», dice convencido este joven que quiere estudiar Historia en Lleida. «Sin embargo, Historia del Arte también lo llevo bastante mal. No me sé nada y el examen lo tengo mañana. Confío en que cuando lea los apuntes me vaya acordando», concluye Emilio dándose ánimos.

Manuel Sancho es otro de los jóvenes ibicencos que ha hecho el ejercicio en septiembre. «Me ha ido muy bien. Estoy muy contento porque creo que lo he aprobado. Todo el mundo dice que le ha ido mal pero yo veo que no. Aunque luego como suspenda me voy a quedar un poco solo», asegura Manu riendo. Este chico de 19 años quiere estudiar informática, carrera que seguramente curse en Palma. En Eivissa se han presentado poco más de un centenar de jóvenes a los exámenes de selectividad, mientras que en Formentera todos los alumnos que se presentaron en junio aprobaron, de modo que en esta convocatoria no había nadie de Formentera.