El Plan Territorial Insular, del que hasta el momento existe un avance y que próximamente será expuesto públicamente, «limitará de forma muy estricta» el desarrollo urbanístico de Sant Joan, concentrándolo exclusivamente en los sectores «ya consolidados».

En la memoria del avance se recuerda que en es Amunts «los suelos transformados urbanísticamente se encuentran materialmente incrustrados en medio de áreas de alto valor». Esa es la única zona de Balears donde la Ley de Espacios Naturales (LEN) preveía las Àreas de Asentamiento en Paisajes de Interés (AAPI), auténticas urbanizaciones (como Benirràs, Allà Dins y Na Xamena) ubicadas dentro de Àreas Naturales de Especial Interés (ANEI). La concesión de licencias fue paralizada allí a través de una moratoria decretada por el Govern.

En la práctica, Sant Joan no tiene ahora planeamiento que aplicar. Con la moratoria y con la suspensión de su Plan de Delimitación del Suelo Urbano (PDSU), que los expertos consideran aún más «chapucero» que el de Santa Eulària, ese municipio está a expensas de que el PTI le permita un ligero crecimiento.

En es Amunts, lo que hará el nuevo planeamiento insular es delimitar lo que realmente está edificado, mientras que el resto pasará a convertirse en suelo rústico protegido. Los huecos que queden libres en las áreas edificadas sólo se podrán dedicar a equipamientos y a unas pocas viviendas unifamiliares aisladas. El PTI permitirá clasificar suelo urbanizable de Sant Joan, pero serán viviendas residenciales y pegadas a los núcleos