EUGENIO RODRIGUEZ El concejal del Grupo Municipal del PP de Eivissa Sergio de la Torre advirtió al equipo de gobierno en el último pleno de la existencia de un vertedero incontrolado «de 30-40 metros cuadrados» justo al lado de la urbanización Deisi, en es Viver, y rogó que se retiraran los escombros que se están acumulando en este nuevo foco de suciedad en la ciudad.

La denuncia del concejal popular se queda muy pequeña comparada con la lengua de porquería y escombros de 150 metros de largo que se extiende en el polígono industrial, pasada la gasolinera de la rotonda de Pachá, y que hace más de un mes el Ayuntamiento ya se comprometió a eliminar.

La Policía Local incluso abrió una investigación, según dijo la entonces concejal de Ciutat Sostenible, Marta Roldán, para intentar averiguar quiénes han convertido la cuneta de esa carretera en un improvisado vertedero, entre otras razones, para evitar que se vuelvan a verter escombros. Pero no sólo éstos siguen allí, si no que ahora mismo hay más. Lo mismo sucede en otros puntos de la ciudad, como en el aparcamiento disuasorio de es Pratet, donde se acumulan de forma casi perenne escombros y basura.

El responsable de la empresa concesionaria del servicio de limpieza en Eivissa (Cespa), Crescenciano Huerta, reconoce que aún no ha concretado con el Ayuntamiento la limpieza de este vertedero. «No es un proceso fácil. Primero hay que retirar los objetos voluminosos y la basura, para después proceder a la retirada de los escombros».