Dos preguntas del grupo popular y una moción de control del
conseller del grupo mixto sirvieron ayer para que el conseller
insular d'Urbanisme, Josep Marí Ribas, Agustinet, diera algunas
pistas sobre el futuro inmediato del Plan Territorial Insular
(PTI). La más importante de ellas es que el avance del PTI será
llevado a pleno «en muy breve espacio de tiempo», concretamente
durante el próximo mes de julio, que comienza el lunes.
El pleno, en sesión extraordinaria, decidirá entonces si se
lleva o no a exposición pública, aunque, como señaló Marí Ribas al
término de la sesión ordinaria de ayer, si la mayoría se opusiera
el Consell también podría exponerlo por su cuenta. La votación no
será, pues, sobre si cuenta o no con el apoyo de los grupos
políticos.
Durante «al menos» dos meses (seguramente tres) se podrán
presentar alegaciones. Ese periodo acabará, según Marí, en octubre
o noviembre. El conseller no quiso responder a la pregunta de Joan
Buades, del grupo mixto, referente a si el avance irá acompañado de
una moratoria, como en Menorca. Buades expresó su temor a que el
PTI no se apruebe antes del mes de abril de 2003, límite que
establecen las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT), y
que el Consell lo utilice durante las próximas elecciones, que se
celebrarán en mayo, para mostrar a los ciudadanos «lo que harían
los progresistas si tuvieran mayoría». El responsable del urbanismo
pitiuso le aseguró que estará listo en abril para su aprobación
definitiva, pese a que esa fecha sea un «objetivo voluntarista»
establecido por el Govern hace tres años «por desconocimiento de la
realidad de las Pitiüses».
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