La huelga de controladores franceses tuvo ayer una escasa
incidencia en el aeropuerto de Eivissa, donde los retrasos
registrados en los vuelos internacionales hacia la isla se situaron
entre los 16 y los 30 minutos, aunque 18 de estos vuelos superaron
mínimamente este margen, llegando en casos muy excepcionales a
situarse cerca de los 60 minutos de retraso.
Según datos facilitados por Aeropuertos Españoles y Navegación
Aérea (AENA), el aeropuerto de Eivissa tenía 113 vuelos programados
para la jornada de ayer. Los retrasos sufridos por éstos se
situaron en una media de 16 minutos, lo que repercutió de un modo
casi nulo en el funcionamiento de las instalaciones aeroportuarias
y en el tráfico aéreo pitiuso.
En el caso del aeropuerto palmesano de Son Sant Joan, la huelga
de controladores afectó a más de 120 vuelos y a unos 22.000
pasajeros, según AENA, incluyendo cancelaciones de vuelos y
retrasos de casi cuatro horas (213 minutos). En estas
instalaciones, las dilaciones medias por regulaciones francesas han
sido de 55 minutos para los despegues y de 47 para los aterrizajes,
aunque hubo unos 30 vuelos que superaron la media de los 60
minutos.
Las compañías aéreas anunciaron también que se habían visto
obligadas a cancelar algunos vuelos por «problemas técnicos», pese
a establecerse rutas de contingencias para paliar los efectos de la
huelga de los controladores franceses, portugueses e italianos en
el tráfico aéreo.
AENA, en este sentido, habilitó ayer varias rutas de
contingencia para agilizar, en la medida de lo posible, el tráfico
aéreo, una de ellas destinada al tráfico con origen en Balears,
Madrid, Barcelona y Canarias con destino hacia el norte (Reino
Unido, Irlanda y norte de Europa). También se estableció otra ruta
destinada a descongestionar el tráfico con destino a países
situados en el este europeo (sur de Alemania, Italia o
Austria).
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