Todos los vendedores que mantienen sus puestos de frutas y verduras en el Mercat Vell han firmado un manifiesto que han remitido al Ayuntamiento de Eivissa en el que manifiestan su rotunda oposición a un cambio de usos del recinto que pasaría a ser mercado de artesanía, venta de libros y otros productos.

Toni Palerm, uno de los doce vendedores afectados que actúa como portavoz del colectivo, aseguró ayer que «nadie» les ha comunicado «de manera oficial» el cambio de uso del recinto, un proyecto del que han tenido conocimiento a través de los medios de comunicación de la isla. Los vendedores consideran que las manifestaciones e iniciativas al respecto «no reflejan el deseo ni la voluntad de un colectivo, como quieren hacer constar, sino únicamente la obsesión de una persona cuyo único 'quehacer' en los últimos tiempos ha sido deshacer el camino andado por todos aquellos que luchan por la recuperación del mercado».

Además del escrito remitido al Ayuntamiento con las firmas de los vendedores el colectivo está recogiendo las rúbricas de comerciantes y residentes de la zona en contra del cambio de usos del recinto.

Palerm aseguró ayer que su interés «no es polemizar por polemizar» sino que esperan que las críticas hagan reaccionar al Ayuntamiento antes de tener que adoptar otras medidas. Lo que aseguran que no van a consentir «es que se de por hecho» que aprueban la reconversión de usos de Mercat Vell, «simplemente porque no han consultado con los vendedores» y porque hasta ahora no habían hecho pública su postura contraria. «Parece que el que calla otorga y no es así», sentenciaba ayer Palerm.

La voluntad de los vendedores del Mercat Vell «no es otra que dignificar al máximo» el servicio que prestan. A tal efecto aseguran que presentaron un escrito en el Ayuntamiento de Eivissa el pasado 25 de abril en el que solicitaban la adopción de una serie de medidas (mayor vigilancia policial, intensificación de la limpieza, reposición del alumbrado y pintado del edificio, entre otras) «cuyo único fin es mejorar el entorno del mercado y ofrecer el mejor servicio» que entienden que «se merecen tanto los ciudadanos de Eivissa como los visitantes». El Mercat Vell es, a juicio del colectivo, «uno de los puntos emblemáticos de la ciudad no sólo por la edificación en sí, sino por la actividad que desarrolla, que lo convierte en centro de atracción turística».