GUILLERMO ROMANÍ El presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Formentera, Vicent Bonet, no se ha mostrado muy optimista de cara a la marcha de la temporada turística 2002 que acaba de iniciarse. «Ojalá me equivoque -dijo- pero creo que este no va a ser un buen año en Formentera». A juicio del máximo representante de los hoteleros hay muchos factores que influyen en esta circunstancia, desde la ecotasa, al 11-S y sus consecuencias, así como a la recesión económica que están experimentando algunos países tradicionalmente importantes como mercados emisores de turismo hacia Formentera.

Bonet considera que las cifras relativas a la ocupación turística hechas públicas por el Patronat Municipal de Turisme de Formentera «no se ajustan a la realidad» y ha señalado que sus cálculos sitúan la ocupación ligeramente por encima del 50% a nivel global, «lo cual no deja de ser un resultado bastante pobre» ha dicho Bonet que de cara al mes de junio, en el que la ocupación se situó desde los primeros días por encima del 80% el año pasado, ha avanzado que «no creo que se alcancen cifras como las de 2001». El máximo representante de los hoteleros formenterenses confía en que pese a los augurios, no muy buenos, la temporada no sea catastrófica sino «simplemente floja, muy floja».

Vicent Bonet ha señalado que desde mayo la Asociación elaborará sus propios sondeos para conocer la ocupación de los establecimientos afiliados. Los hoteleros acostumbran a contestar periódicamente a la Conselleria de Turisme del Govern que mediante fax consulta cada quince días los datos ocupacionales de la isla.

El revuelo causado por las cifras de ocupación turística que publicaba ayer este rotativo, obligó al Patronat de Turisme a hacer de forma urgente un nuevo sondeo sin esperar al próximo jueves, día en que los realiza. Las cifras de este control son de un 62% de ocupación y reflejan mejor la realidad, dijo la concejala de turismo, Pilar Serra, ya que desde el jueves pasado ha entrado un gran flujo de turistas en la isla.