El presidente ejecutivo de First Choice, Peter Long, consideró ayer una «irresponsabilidad» mantener el 1 de mayo como fecha de inicio del cobro de la ecotasa ante la «difícil situación del mercado» turístico, que ha provocado en este mayorista una caída del 15 por ciento en las reservas hacia Balears. A bordo del crucero Island Escape, que permanece atracado en el puerto de Palma, el responsable del turoperador británico, que cada año propicia la llegada de 630.000 turistas a las islas, solicitó al Govern que retrase la introducción del impuesto hasta, «al menos», el mes de noviembre para «salvar» la temporada veraniega.

Long justificó su petición en que la entrada en vigor de una nueva figura impositiva «no ayuda» a solventar los problemas que sufre el mercado turístico tras los atentados del 11 de septiembre en EEUU, un fenómeno que, en el caso de First Choice ha causado una caída del 10 por ciento en las reservas hacia todos los destinos que comercializa. Pese a compartir con el Ejecutivo isleño la necesidad de adoptar medidas para conservar el medio ambiente, finalidad que tiene el impuesto balear, Long mostró su «decepción» ante la decisión del Govern de introducir la ecotasa el 1 de mayo porque «pensar que este gravamen no va a afectar al turismo es un error».