Pere Cañellas, Francesc Antich y Joan Bufí explicaron el contenido del encuentro.

L. F. A./R.L.
Tres horas de encuentro entre las federaciones hoteleras de Eivissa y Formentera, Mallorca y Menorca y el presidente del Govern balear, Francesc Antich, no han servido más que para que cada una de las partes reafirmase su postura sobre el cobro de la ecotasa. El Ejecutivo insiste en empezar a cobrar la tasa el 1 de mayo y los hoteleros, en recurrirla ante los tribunales. Al término del encuentro que se celebró ayer por la tarde, Antich aseguró que las posiciones de una y otra parte «no han cambiado en absoluto», por lo que siguen siendo «las mismas de antes».

Con todo, destacó que el encuentro, celebrado en la sede del Govern balear, ha servido para poner de manifiesto el «ánimo» de ambas partes por «dialogar» y «rebajar» el clima de tensión que se ha instaurado últimamente entre las relaciones del Ejecutivo y los hoteleros a raíz, sobre todo, de la aplicación del impuesto sobre estancias en alojamientos turísticos. El presidente del Govern recalcó que uno de los acuerdos positivos que se ha alcanzado es crear una comisión con presencia de representantes de las conselleries de Turisme e Hisenda y los responsables hoteleros para «analizar en profundidad» los datos que manejan una y otra parte sobre la «situación real» del turismo en las islas.

En cualquier caso, el presidente se negó a avanzar si el Govern optará por retrasar el cobro del impuesto ecológico a noviembre de este año si finalmente se confirman las malas expectativas de ocupación y reservas para el próximo verano, ya que no quiere hacer previsiones anticipadas sobre este aspecto. Una vez hayan confrontado las cifras, «la idea es seguir manteniendo reuniones para adoptar, si fuera necesario, medidas», insistió Antich, quien apuntó que estos encuentros, para los que aún no se ha fijado ningún calendario, tienen la intención es que se produzcan de una manera «rápida».

El presidente del Govern aseguró que en estas reuniones futuras no sólo hablarán del impuesto turístico, sino también de otros aspectos que relacionen a ambas partes, como la promoción turística, añadió. Tras advertir que la reunión «ha creado quizá más expectación de lo que realmente ha dado de sí», el presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pedro Cañellas, admitió que las «muchas discrepancias» que afectan al sector y al Govern balear «no se arreglan en un encuentro de una hora», y de ahí la importancia de que se convoquen nuevas reuniones. Al final de su comparecencia ante los medios, Antich dejó claro que «ni el Govern se ha propuesto nunca retrasar la ecotasa, ni los hoteleros reconsiderado su postura de recurrirla ante los tribunales».