Los proyectos de rehabilitación de espacios turísticos no tendrán carácter prioritario en el plan de inversiones que se realizará con la recaudación de la ecotasa, que comenzará a cobrarse a los turistas a partir del día 1 de mayo. Los partidos del Pacte han llegado a un acuerdo para que las inversiones medioambientales tengan prioridad absoluta frente a la rehabilitación de espacios turísticos, una decisión que se produce después de la postura de los hoteleros de no incorporarse a la comisión que debe elegir los proyectos de inversiones que se desarrollarán con el dinero de la ecotasa.

Además, las distintas fuerzas de izquierdas creen que el auto del Tribunal Constitucional, que defendió el cobro del impuesto debido a sus fines medioambientales, justifican un plan que se deje en un segundo plano las rehabilitaciones integrales de las zonas turísticas. Desde el Pacte han recalcado que todas las inversiones tendrán «un componente medioambiental, aunque algunos de ellos estarán vinculados a espacios turísticos». Un portavoz de los partidos del Pacte descartó la posibilidad de utilizar la recaudación del impuesto turístico para realizar grandes proyectos de rehabilitación.

«Lo que sí haremos es proyectar en alguna zona hotelera un sistema energético alternativo», reconocieron. La intención de los partidos que integran el Pacte es aplicar programas medioambientales que puedan ser disfrutados por los turistas "uno de los grandes objetivos de la ley", aunque también se primarán las inversiones agrícolas. La creación de una red de depuración terciaria es uno de los proyectos considerados prioritarios por el Pacte especialmente por el PSM y Els Verds.