El Jefe de Departamento de la Conselleria de Medi Ambient del Govern de les Illes Balears, Joan Mayol, tras su visita a Formentera y Eivissa, fue tajante: «no hay plaga de tomicus destruens en Formentera y tan sólo un aumento importante en algunas zonas de Eivissa». Mayol, que estuvo acompañado por Juan Carlos Ortega, subjefe de la guardería forestal de Balears, mostró su satisfacción por la poca presencia de este escarabajo perforador en los pinos caídos en la Mola. Mayol aseguró que «el tomicus destruens es un escarabajo que siempre está presente en los bosques de pinos, pero es su proliferación desusada la que significa el inicio de una plaga y en estos momentos podemos asegurar que en Formentera no hay plaga de ningún tipo».

Aunque la noticia es alentadora, tanto Mayol como Ortega señalaron que sí se ha producido un considerable aumento de este tipo de escarabajo en algunas zonas de Eivissa, indicando que las zonas donde se está produciendo esta proliferación que «aún no llega a plaga aunque podría preverse el inicio de la misma si no se actúa con rapidez», dijo Ortega, son Sa Talaia de Sant Carles, Es Pou des Lleó, Portinatx y algunas zonas de la Cala de Sant Vicent.

El tomicus actúa preferentemente sobre árboles caídos, árboles debilitados por la falta de agua o quemados, bien por el fuego bien por el salitre procedente de lmar y que el fuerte viento, caso de los pasados temporales, abate sobre los pinos; no obstante Ortega indicó que «curiosamente en la zona de la Cala de Sant Vicent donde se produjo un gran incendio el pasado verano, la incidencia o presencia del tomicus es mucho menor de la esperada en estas circunstancias».

Juan Carlos Ortega señaló que de lo que ahora se trata es de que los propietarios corten los pinos dañados por el temporal o autoricen la tala de los mismos y que se quemen o trituren las ramas, mientras que los troncos, caso de no poderse retirar por su excesivo volumen, se agrupen de una manera específica para que puedan ser fumigados y así erradicar el tomicus de los mismos.

En Mallorca las zonas más afectadas por el tomicus destruens son las de Andratx, Calvià y la Serra de Tramuntana, concretamente en los puntos más castigados por el temporal de noviembre pasado porque tal y como explicó Francesc Grimalt, delegado en Balears del Colegio de Ingenieros Técnicos Forestales, el tomicus destruens actúa sobre la corteza de los pinos más débiles que es donde hace su puesta de huevos, hasta un total de cuatro al año. La mejor manera de prevenir la plaga es sacar la corteza lo antes posible.

Un depredador que actúa entre septiembre y abril
El Tomicus destruens es una especie de coleóptero de la familia Scolytidae y como las especies tomicus piniperda y tomicus minorpasser, muy semejantes entre ellos, ataca todas las especies de pinos y se dirige al tronco y a las ramas más gruesas. Las tres especies son muy parecidas, pero precisamente la principal diferencia entre ellas es que los adultos del tomicus piniperda y del tomicus minorpasser no están activos durante el invierno, pero el tomicus destruens si lo está entre los meses de septiembre y abril, periodo durante el cual realiza las puestas de huevos en los troncos. De esta manera, en un mismo pino pueden coexistir larvas de diferentes edades.