La empresa propietaria del restaurante en el que una mujer que se dedicaba a labores de limpieza perdió la vida al golpearse en la cabeza cuando utilizaba un montacargas como ascensor niega que este hecho haya sido accidente laboral. La Dirección General de Treball ha confirmado este dato explicando que, en este caso, las competencias directas de la investigación han dejado de ser de este departamento para pasar a los tribunales.

El hecho de que la empresa haya negado que se trate de un accidente laboral «no implica que los juzgados puedan dictaminar lo contrario y exijan responsabilidades a los propietarios», han explicado fuentes de Treball. Es más, el accidente comenzó a investigarse como accidente laboral por la vía administrativa. El siniestro se remonta al pasado domingo 28 de octubre cuando una mujer española aunque nacida en Filipinas de 55 años falleció en un restaurante chino de Sant Antoni mientras efectuaba tareas de limpieza.

Con respecto al accidente laboral registrado el 8 de octubre que costó la vida a un joven de 19 años de edad, la Dirección General de Treball aseguró que todavía no se han esclarecido por completo las causas del siniestro y que están a la espera de unas pruebas de autopsia que han tenido que ser remitidas a Madrid. En este caso el accidente se produjo cuando, por motivos desconocidos, el joven se precipitó desde un poste en Formentera.