El gerente del hospital Can Misses, Ignacio Martínez, ha recibido una carta del personal médico y de enfermería del departamento de traumatología en la que se opone al traslado de esta unidad, que ahora está en la primera planta, a la planta baja del centro.

Martínez, aunque asegura que comprende los motivos de la queja, insistió ayer en que esta solución es «la más lógica» y la que responde «mejor» a los intereses generales del centro hospitalario. Esta reforma está contemplada dentro del plan funcional del hospital y consiste en trasladar el departemento de maternidad, que ahora está en la planta baja del edificio, a la primera planta junto a la unidad de paritorios. Este cambio supone trasladar la unidad de traumatología de la primera planta a la planta baja. El cambio no gusta al personal del departamento que argumenta que lleva en la primera planta desde el año 1985 y que las habitaciones de ginecología y maternidad "que están en la planta baja que deberá ocupar" tienen poca luz.

Sin embargo, el gerente insiste en que lo más lógico es este cambio ya que al pasar traumatología a la planta baja estará en la misma zona de urgencias, a donde llegan los accidentados, la mayor parte con traumatismos. Además en esta planta está la unidad de rayos y próximamente se instalará la de resonancia magnética, ambas relacionadas con traumatología. El gerente ha mantenido reuniones con todos los departamentos afectados por el cambio e insiste en que su intención no es perjudicar a nadie sino velar por el «interés global» del centro.