La Conselleria insular de Medi Ambient planea regenerar una cantera de Eivissa con los escombros esparcidos por 139 vertederos incontrolados de la isla y con aquellos que se produzcan en el futuro. En la actualidad no existe un lugar autorizado donde se puedan trasladar los residuos de demolición y construcción.

El proyecto está en fase «embrionaria», según señaló un portavoz de Medi Ambient, si bien el objetivo es ponerlo en marcha a partir del año que viene. Técnicos de la Conselleria ya han detectado la cantera adecuada para sus propósitos, aunque no han querido detallar dónde está enclavada. No obstante, ofrecieron dos datos: no es de las más grandes, pero sí de las más visibles. Su rehabilitación supondría una mejora notable en el paisaje pitiuso. El proyecto permitirá contar desde 2002 con un espacio para verter los residuos voluminosos que se generan, que anualmente alcanzan, según datos del Plan Director Sectorial de Residuos de Eivissa y Formentera, 42.760 toneladas de restos de demolición y de construcción.

El objetivo de hallar un espacio para acumular ese tipo de material es contemplado en el Plan de Residuos, donde se habla de medidas de «urgencia» para acabar con ese problema, que en las Pitiüses alcanza proporciones dantescas. Así, según un estudio encargado por Medi Ambient a una consultoría, existen en las Pitiüses 139 vertederos incontrolados que ocupan una superficie de 372.889 metros cuadrados, equivalente a 75 campos de fútbol. De todos los vertidos que se realizan, los de escombros representan el 75 por ciento.

En la lista de vertederos, Santa Eulària está situada en el primer lugar en cuanto a metros cuadrados ocupados: 141.962 metros cuadrados, repartidos en 29 vertederos. Precisamente, el alcalde de Santa Eulària, Vicent Guasch, reclamó durante el último pleno de la Corporación que el Consell habilite vertederos para poder eliminar los restos de construcción. A su juicio, si no hay un lugar donde echar los escombros es lógico que algunos empresarios opten por esparcirlos por el campo.