El alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, ha expresado mediante
una carta pública que está «preocupado y ocupado» en encontrar
soluciones a la complicada situación de este municipio que este
año, «por diversas circunstancias se ha manifestado más
claramente», reconoce. El alcalde aclara con respecto a los
resultados de la reunión mantenida la semana pasada con diversos
colectivos de Sant Antoni que «en ningún momento de la reunión se
dijo que no se quieran aplicar las ordenanzas». Lo que si se dijo,
según el alcalde, «es que la aplicación estricta de las mismas no
es fácil» por más que sean de obligado cumplimiento.
«También me referí -dice textualmente- acertadamente o no a que
podrían derivarse incomprensiones y puse como ejemplo que algunos
bares de tapas, que no son precisamente bares de turistas y a los
que acudimos asiduamente los residentes, las incumplen en cuanto al
aforo u otros aspectos y aparentemente no producen ningún problema,
pero en cambio incumplen claramente».
El alcalde asegura que en ningún momento se ha querido «torear»
a nadie y menos a los que asistieron a la reunión.«No me gustan las
corridas de toros-dice Marí Tur- no he presenciado ninguna nunca,
pero me gustan los toreros que dan la cara aunque les protesten sus
faenas desde los tendidos». Antoni Marí Tur asegura que siempre ha
afrontado los problemas pero «si en esta corrida se pretende matar
al torero en vez del toro, esa ya es otra suerte, especialmente si
las banderillas se ponen desde alguna tribuna aunque esta sea de
papel».
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