Varios coches salen de la bodega del Federico García Lorca. Foto: VICENÇ FENOLLOSA.

El presidente de Fomento del Turismo de Eivissa, José Colomar, no duda en vincular la falta de nuevas licencias de taxis a las presiones que están ejerciendo los empresarios del sector -que no desean más permisos- sobre el Ayuntamiento de Eivissa. «Al alcalde no le va bien enfrentarse a un colectivo influyente como éste porque repercutirá en los votos», espetó Colomar.

El representante de este organismo considera que «es un escándalo» y un hecho «muy preocupante» sobre el que han enviado sendos escritos de queja al Ayuntamiento de Eivissa. «Primero el alcalde dijo que iba a aumentar el cupo, luego le han dicho que no y ahora dicen que lo dejan para el año que viene... bueno, francamente no entiendo nada de lo que pasa», explica Colomar, que sentencia que «en todo caso, el perjuicio está ahí».

Como presidente de Fomento del Turismo y responsable de un hotel, Colomar asegura que los problemas con clientes directos y turistas son cotidianos por la falta de taxis. «La isla queda mal por proteger a cuatro señores para que ganen el doble» dice, y añade que «contra esto no hay campaña de promoción que consiga contrarrestarlo». Los taxis «no son suficientes, tardan horas en llegar y a veces ni atienden las llamadas de radiotaxi porque son interceptados por el camino por otros turistas», relata.

Colomar admite que el problema, en menor medida , se registra también en los ayuntamientos de Santa Eulària y Sant Antoni pero que en Eivissa «es de vergüeza porque hay que asumir que toda la isla concurre en este municipio por las noches». Ante la saturación de vehículos que sufre Eivissa, Colomar apuesta por reducir la presencia de turismos y aboga por transporte público y taxis.