El presidente del Govern de les Illes Balears, Francesc Antich, aseguró ayer tras su audiencia con el Rey Don Juan Carlos que el Monarca se mostró dispuesto a «echar una mano» para que la Comunitat Autònoma pueda conseguir más inversiones. En su encuentro con Don Juan Carlos, el presidente balear le explicó los principales problemas que presenta Balears, entre los que destacó la construcción de un gasoducto con la península. El presidente explicó que durante su audiencia también tuvo ocasión de conversar con el Monarca acerca de temas relacionados con el turismo y el medio ambiente.

A la salida de la audiencia, Antich explicó que Balears ya presenta un índice de 900 o 950 coches por cada mil habitantes «y, si queremos cambiar el modelo de crecimiento, hay que empezar por un nuevo modelo de transporte público», señaló. El presidente destacó la «especial sensibilidad» del Rey en materia de carreteras. «Coincidimos con él en que es necesario mejorar las actuales», comentó Antich, que reiteró su oposición a las «autopistas y las carreteras que estropearan el paisaje».

El presidente no quiso profundizar en las divisiones internas que existen en UM después de que se haya sabido que un sector del partido defiende la necesidad de romper el acuerdo con el resto de socios del Pacte. «Ni como presidente del Govern ni como secretario general del PSIB me meteré en las minorías o mayorías de cada partido, que tienen autonomía plena para adoptar sus decisiones», señaló. No obstante, el presidente recordó que UM apostó en su día por el acuerdo y, de momento, no ha habido un cambio de decisión. «Ni me preocupa ni me deja de preocupar», aseguró.