Llegar ayer a las cinco de la tarde al Passeig de ses Fonts de Sant Antoni de Portmany, momento en que se inauguró la muestra de trabajos típicos ibicencos, significaba reencontrarse con la tradición manual de la isla. Espardenyes, encaje de bolillos, tejidos... oficios que han marcado la manera de vestir de muchas generaciones a partir de las manos de los artesanos de la isla.

El visitante de la muestra puede comprobar el proceso que los artesanos siguen para elaborar a mano los complementos típicos que sirven para decorar el hogar o para darles una utilidad en las labores cotidianas. A primera hora de la tarde de ayer no había mucha gente, pero conforme avanzó la jornada los curiosos fueron acercándose por el lugar para comprobar in situ el trabajo de este colectivo.

Los turistas son los que más interés mostraron. Para ellos precisamente es para los que se organizan este tipo de muestras. Así pueden conocer además de las playas y el sol de la isla, las características de la tradición ibicenca. Además de presentar ante el público talleres en vivo, cada artesano dispuso ante los ojos del visitante un muestrario que servía para ver el fruto final de su trabajo.