Los dos partidos del Pacte Progressista acusados por la Asociación de Vecinos San Pablo de bloquear la construcción del gran parque de Can Escandell, Esquerra Unida (IU) y Els Verds, explicaron ayer que no se oponen a que se haga esta zona verde y que, de hecho, lo que lo imposibilita es el actual planeamiento. Lo que sí reconocen es no estar dispuestos a apoyar un incremento del suelo urbano del municipio de Eivissa para que se pueda hacer este parque y es que, en palabras de Marta Roldán, coordinadora de Els Verds, «ese sería un precio demasiado alto».

Tanto IU, que explica su postura en un artículo de opinión que se publica hoy en este mismo periódico, como Els Verds recuerdan que este proyecto fue prometido por el anterior ex alcalde, Enrique Fajarnés, y nunca por el Pacte. «Era un proyecto electoralista [...] producto de una negociación con el propietario de los terrenos, vinculado a un gran proyecto urbanístico, situado al margen del planeamiento urbano del municipio, y fuera de cualquier proyecto racional de ciudad», dice el coordinador general de IU, Juan Manuel Rubio. Este partido también afirma de forma tajante que no puede coincidir con los vecinos en que sea necesario «y mucho menos en que sea una prioridad del municipio». A pesar de todo, IU se pone a disposición de la asociación y sus vecinos para hablar del tema.

También lo hace la formación Els Verds a cuya coordinadora le ha sorprendido sobremanera que la Asociación San Pablo diga que Joan Buades no ha querido recibirle. Roldán dice que Buades no tiene constancia de que se le haya pedido reunión alguna y que se encontrará con ellos en cuanto se lo soliciten.

Els Verds, que está a favor de que haya nuevas zonas verdes, cree que hay que buscar fórmulas para que éstas sean una realidad sin que se construya más. Roldán sugirió la posibilidad de que el Ayuntamiento compre terrenos en la zona, calificados como rústicos, para el parque. «Cuando esté redactado el Plan Territorial nos sentaremos con los planos y será el momento de decidir dónde hacer zonas verdes. Pero no es el momento de pedir más suelo urbano», comenta Roldán.