El conseller d'Ordenació del Territori del Consell Insular pitiuso, Josep Marí Ribas, reconoció ayer que, como a todos, la nueva moratoria del Govern le había pillado por sorpresa. Pese a que sólo tres días antes Marí Ribas había defendido ante el pleno del Consell que las Pitiüses no necesitaban nuevas moratorias, el conseller matizó ayer que una cosa son las normativas de rango insular y otra las de carácter balear.

Según el titular de Ordenació del Territori es «correcto» que el Govern que preside Francesc Antich recurra a una nueva norma cautelar dado que ha puesto en marcha una reforma de las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT) y mientras dure su tramitación la construcción debe estar controlada. En cualquier caso, Marí Ribas cree que esta medida está en la línea «del modelo territorial que defiende el Pacte y que ya se planteó en el programa electoral y en el programa de gobierno», por lo que no cree que sea realmente una sorpresa.

El conseller también confirmó que en los próximos días será necesario sentarse a hablar con el Govern y conocer en profundidad qué cambios se van a operar en las DOT, ya que ésta norma condiciona el Plan Territorial Insular. Mientras que la primera tiene rango balear y establece unas cifras máximas para todas las Islas, la segunda tiene carácter específico para cada isla y no puede marcar cifras superiores a las establecidas en las DOT. El objetivo, según señaló ayer el conseller, es que ambos trabajos se lleven de ahora en adelante coordinados para evitar desajustes o retrasos en la presentación de los planes insulares, en principio previstos para 2003.