El Consell pitiuso ha iniciado la tramitación de un expediente de disciplina urbanística contra la empresa explotadora de ses Salines, Salinera Española, por haber llevado a cabo unas obras que han comportado una modificación morfológica de los estanques, algo expresamente prohibido por la ley que convirtió ese paraje en Reserva Natural.

Para incoar ese expediente, la institución insular se ha subrogado las competencias municipales del Ayuntamiento de Sant Josep, ya que, según se justifica en un decreto de Presidència, la Corporación no ha contestado a los requerimientos para que paralizase las obras que se desarrollaban en ses Salines desde que éstas fueroin denunciadas el 26 de marzo pasado.

El expediente por infracción urbanística se abre contra Salinera Española y contra el director técnico de las obras por haber efectuado obras sin contar con licencia o autorización administrativa. Las actuaciones consisten en la «substitución de diversos tramos de las antiguas motas (diques) separadoras de los estanques de es Codolar de ses Salines, en la zona conocida como Regió Grossa, por terraplenes de mayores dimensiones, mediante el vertido de grandes cantidades de material de cantera».

Las modificaciones son visibles desde la carretera de La Canal en dos sectores cercanos al cruce de Cap des Falcó. Antes de ser modificadas, las motas tenían 1'2 metros de ancho, mientras que ahora ocupan entre cinco y ocho metros y su aspecto es similar al de un espigón. Y si antes tenían una altura de 20 centímetros sobre el nivel del agua, ahora es de un metro.