El conseller de Presidència y portavoz del Govern de les Illes
Balears, Antoni Garcías, lamentó ayer que el Consell Insular
d'Eivissa i Formentera no vaya a poder recibir las competencias en
materia de carreteras, aunque apuntó que si la institución pitiusa
está interesada se iniciarán conversaciones encaminadas a otorgarle
una encomienda de gestión. Con esta fórmula, el Consell no será el
titular de la competencia, pero podrá gestionarla por delegación,
aunque el Govern seguirá siendo el que determine la partida
económica que se destine a las carreteras de las Pitiüses.
Hay que recordar que el Consell no puede recibir la competencia
porque el equipo de gobierno no ha conseguido la mayoría absoluta
que exige la ley en ninguna de las dos votaciones que se han
producido. «Creemos que era y es una buena ley de transferencias»,
manifestó Garcias. «El Consell Insular d'Eivissa i Formentera salía
beneficiado con mucha ventaja. Han sido pequeñas diferencias las
que han hecho que no se puedan asumir las competencias, pero creo
que el Consell y los ciudadanos salían muy beneficiados de estas
transferencias», señaló el portavoz, que dijo que era «una pena»
que los miembros de la primera institución pitiusa no hubieran
entendido el gran beneficio que suponía el traspaso.
Al término de la reunión de ayer del consell de govern, el
portavoz recordó que el concepto de «proximidad» en la gestión es
fundamental para el Pacte de Progrès que gobierna las Islas y, por
ello, insistió en que el Govern de les Illes Balears está dispuesto
a negociar con el Consell Insular para encontrar una fórmula que
permita tomar decisiones en materia de carreteras desde las
Pitiüses. Además, agregó que el objetivo de descentralizar la
gestión de esta materia sigue en pie y que, por tanto, los trámites
siguen adelante para los consells de Mallorca y Menorca.
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