La escuela de música «La Clave de Sol» celebró ayer por la tarde en el auditorio de Cas Serres su concierto de final de curso. En él participaron cerca de 100 alumnos de los dos centros, el de Eivissa y el de Santa Eulària. Durante dos horas el escenario recibió la presencia de grupos de alumnos de entre 5 y 14 años, quienes presentaron ante un público familiar los conocimientos adquiridos en los últimos nueve meses.

Los debutantes de Santa Eulària comenzaron un concierto que congregó la atención de numeroso público, que llenó casi por completo el auditorio de Cas Serres. La directora de la escuela «La Clave de Sol», Angela Dellert, fue la encargada de presentar el acto: «El concierto no se apoyará esta vez en piezas infantiles como en otras ocasiones, no persigue un fin pedagógico. Los alumnos representarán piezas de autores clásicos, modernos y temas populares». Después de estas palabras el primer grupo de niños se apoderó del escenario dirigido por la batuta de su profesora.

Los cerca de 100 participantes lucían camisetas idénticas. Todas eran blancas, con la leyenda de la escuela y con un diseño original que combinaba una nota musical con la forma de un sol. El público agradeció el esfuerzo de los chavales con aplausos cerrados, lo que sirvió para atenazar los nervios a los pequeños que se subían por primera vez a un escenario. Piano, flauta, guitarra y canto clásico fueron los ingredientes que completaron la receta de la quinta edición de este concierto.