El Consell Insular tiene muy difícil lograr el voto extra que necesita para que se pueda tramitar el traspaso de competencias de carreteras y, salvo que cambie mucho el panorama, lo más probable es que el equipo de gobierno de la institución se quede solo en la votación que tendrá lugar la próxima semana en sesión plenaria.

El vicepresidente de la institución, Vicent Tur, reconoció ayer que es «absolutamente imposible» aceptar las condiciones planteadas por el Partido Popular y, aunque hoy se reúne con Joan Buades, de Els Verds, cuyo voto afirmativo sería suficiente para sacar la iniciativa adelante, las posiciones están hasta hoy muy separadas. Buades reiteró ayer tarde que exigirá gestos en materia de bienestar social y Tur insistió en que no puede aceptar condiciones que afecten a otras leyes.

El conseller ecologista apuntó que no puede permitir que con su voto «haya más dinero para carreteras que para bienestar social». Además, se mostró sorprendido por el hecho de haber sido llamado sólo cuando han fracasado las negociaciones con el PP y de que el equipo de gobierno tenga tanta prisa en llevar el tema a pleno «cuando podría negociarlo tranquilamente durante el verano». Tur, por su parte, dijo estar preocupado «sólo relativamente» por la posibilidad de que no lleguen las competencias. «Tendrán que dar explicaciones los que lo impidan», dijo.