Los vecinos de ses Figueretes están muy preocupados por el incremento de la prostitución en el barrio que han constatado durante los últimos seis meses. El centro de la actividad es la calle Navarra y sus alrededores y, aunque los vecinos entienden que detrás de esta situación se esconde una compleja problemática social, consideran que las administraciones tienen que ponerse de acuerdo y actuar y evitar que vaya a más.

El presidente de la Asociación de vecinos de este barrio, Bartomeu Roig, explicó que anteayer hubo una reunión para tratar ésta y otras cuestiones de interés para ses Figueretes y reconoció que la «crispación» está creciendo. «Hay gente que quiere denunciarlo ante los juzgados, pero no sabemos si eso serviría de algo». «Entendemos que es un problema social, pero para las familias de la zona no es una situación agradable», añadió Roig.

Según relató el representante de los vecinos, los episodios de violencia o inseguridad son muy puntuales y sólo se producen cuando hay por medio un problema de drogas. Sin embargo, comentó que se están alquilando plantas bajas y pisos para esta actividad y que un ciudadano puede ser incluso abordado en el portal de su casa por una mujer que le ofrece sus servicios.

A la asociación le consta que ha tenido lugar alguna redada y que la mayoría de los inmigrantes que se dedican a esta actividad son legales. Se ha acudido a la Policía Nacional y la Local, así como a los servicios sociales, de momento sin mucho éxito. «Pero no se va a consentir que esto se convierta en un lugar de concentración», argumenta Bartomeu Roig. Sin querer concretar, de momento, qué medidas estarían dispuestos a emprender, los vecinos afirman que si hay que llevar a cabo algún tipo de movilización están dispuestos a hacerlo.

De momento han pedido una entrevista a la directora insular de la Administración del Estado, María Encarnación Sánchez Jáuregui, dado que el Ayuntamiento de Eivissa les ha manifestado que este problema se escapa de sus competencias.