GUILLERMO ROMANÍ El director de Recursos Hídrics del Govern de les Illes Balears, Antoni Rodríguez, confirmó ayer en Formentera que la ampliación de la desaladora de es Ca Marí estará operativa este mismo verano.

Las obras costarán 1.700 millones de pesetas y serán sufragadas íntegramente por el Ministerio de Medio Ambiente. Gracias a ellas se duplicará la producción de agua potable, que pasará de 2.000 m3 diarios a 4.000 m3 diarios cuando la planta esté a pleno funcionamiento.

Está previsto construir un gran depósito regulador con una capacidad de 20.000 metros cúbicos y cambiar las tuberías del emisario que devuelve la salmorra al mar. Según ha explicado Rodríguez, las obras de la desaladora «son un proyecto en el que el Ministerio de Medio Ambiente ha demostrado mucho interés en hacerlo a toda prisa, de manera que una parte del mismo, el que afecta a la producción, esté finalizado para este verano». El director de Recursos Hídrics especificó después que para más adelante quedará el depósito regulador «motivo que ha hecho que nos desplazáramos aquí, para ver la excavación realizada».

La excavación es producto de la extracción de material que se hizo el pasado año para enterrar la basura del vertedero de es Cap de Barbaria con motivo de su remodelación con vistas al cierre en el 2003.