Educar sobre dos ruedas

Entrar ayer en este complejo suponía escuchar un sonido permanente de sirenas de vehículos de las fuerzas de seguridad y comprobar el grado de compromiso demostrado por los menores que participaron de la propuesta. Un concurso de dibujo ayudó a comprobar de qué manera interpretan los niños la educación vial, requisito al que tenían que adaptar sus propuestas. Durante la jornada de hoy, tanto por la mañana como por la tarde, se continuará con la celebración de un fin de semana enfocado a despertar el compromiso de los pequeños hacia las personas con las que conviven a diario.

En el exterior del recinto ferial la policía local dirigía un tráfico de vehículos distinto al que acostumbran. Las bicicletas invadieron un improvisado circuito dotado con las señales más comunes y con semáforos a escala. Y es que con iniciativas como esta se inculca en los más pequeños un sentido cívico que les permitirá asimilar mejor los cauces de un comportamiento cívico en un futuro. El nivel de implicación que exhibieron permitió a los organizadores sentirse satisfechos por el despliegue efectuado.

Cruz Roja dispuso de dos maniquíes para que los niños pudieran hacer simulacros de primeros auxilios siguiendo las indicaciones de los voluntarios que les atendieron. Mostrando mucha paciencia, los pequeños hicieron cola y aprendieron las claves para efectuar el boca a boca ante un caso de emergencia. Mientras, unas monitoras entregaban folios y pinturas a los interesados en mostrar su interpretación de educación vial. Para ponderar las posibilidades de cada participante, la organización decidió encuadrar a los dibujantes en dos categorías, de 3 a 7 años y de 8 a 12.