Todas las ovejas menores de un año de Eivissa y Formentera serán vacunadas contra el virus de la 'lengua azul'. La Conselleria d'Agricultura ha decidido, finalmente, llevar a cabo una vacunación masiva para evitar brotes como los que se han dado en Mallorca y Menorca. Además, se realiza antes del verano, época en la que se multiplican los mosquitos, portadores de la enfermedad.

El titular de Agricultura de la institución pitiusa, Vicent Tur, anunció ayer esta medida, que comenzará a aplicarse la próxima semana, y explicó que colaborarán en la vacunación un coordinador de campo y dos veterinarios del Ministerio de Agricultura y otras tres personas contratadas por el propio Consell.

Durante la mañana de ayer se celebró una reunión técnica para perfilar todos los detalles de la campaña en la que estuvo presente Antoni García, técnico del departamento de ganadería del Govern. García explicó que pese a las reticencias iniciales a la vacuna la experiencia práctica en Mallorca y Menorca ha demostrado que la reacción que presentan los animales es «mínima». Al tratarse de una vacuna viva se temía que pudiera producir efectos en las ovejas, pero apenas se han producido casos a destacar, por lo que se ha considerado apropiado extender el uso de la vacuna a toda la cabaña balear. En cualquier caso, apuntó García, si algún animal tuviera que ser sacrificado a raíz de los efectos de la vacuna, el ganadero recibiría la misma indemnización del Govern que la que han recibido los propietarios de animales infectados por esta enfermedad.

Hay que recordar que el virus, de momento, no ha aparecido en las Pitiüses pese a que, hace unos meses, se detectaron unas ovejas enfermas en Santa Gertrudis y se pensó que estaban afectadas por la 'lengua azul'. Las cabras, que también pueden ser contagiadas por este virus, no necesitan ser vacunadas puesto que son portadoras pero no contagian la enfermedad.