Tras una lectura más pormenorizada del presupuesto del Ayuntamiento
de Eivissa, el grupo municipal popular se reafirmó ayer en las
críticas realizadas la semana pasada a las cuentas de la
institución y añadió que suponen una «hipoteca de futuro» para el
Consistorio.
La portavoz del PP de Eivissa, Virtudes Marí, criticó que el
equipo del Pacte Progressista haya endeudado al Ayuntamiento en dos
años en 676 millones de pesetas y denunció que la carga financiera
subirá en 2001 un 5 por ciento, hasta situarse en un 15'55 por
ciento. «Los números cantan», dijo la concejala, que considera que
el equipo que dirige el alcalde Xico Tarrés dedica los presupuestos
«a tapar los agujeros que ha ido dejando a lo largo del último año
y medio». Marí se refirió, especialmente, al deterioro que ha
sufrido la ciudad en ese tiempo y que ahora Tarrés se ve en la
obligación de corregir. Sin embargo, el PP cree que las cuentas de
2001 «no cubren las necesidades básicas ni las promesas hechas por
el alcalde», al que pidió que especifique cómo cumplirá las
promesas realizadas a los comerciantes del Mercat Nou.
Sobre las inversiones, la oposición volvió a reiterar que se
engaña a la ciudadanía y que, de hecho, en comparación con el año
1999, este capítulo presupuestario sólo crece un 1'5 por ciento. La
verdadera prioridad del Pacte en estas cuentas, dijo Virtudes Marí,
es el deporte, y no es que al PP le parezca mal, sino que exige a
los progresistas que lo reconozcan y que no 'vendan' otros
objetivos.
Finalmente, desde la oposición se considera totalmente
«injustificado» el aumento de plantilla previsto para 2001 (que
supone un gasto de un 17 por ciento más en esta materia) y el
incremento de gastos de publicidad, protocolo o para solicitar
informes y estudios externos, que se incrementará hasta alcanzar
los 1.113 millones.
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