El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Eivissa deberá decidir la próxima semana si da el visto bueno al macro proyecto de construcción de un aparcamiento subterráneo en el paseo Vara de Rey a la vista de los informes técnicos que recibió ayer y que apuntan que si bien la iniciativa es viable, la obra resultaría muy compleja y costaría una gran cantidad de dinero.

Según expusieron los técnicos de Laboratorio Balear de Construcción, dos circunstancias complican la construcción del párking subterráneo: el nivel freático de la zona y el hecho de que existan tres tipos de materiales con comportamientos geotécnicos diferentes. Mientras en el lado norte del paseo (el más cercano al mar) predomina la presencia de fangos, en el lado sur sería necesario picar piedra.

Ello implicaría introducir en la zona maquinaria muy pesada con los consiguientes riesgos para los edificios de Vara de Rey, algunos de ellos de principios de siglo y con cimentaciones que pueden no ser muy seguras. «La obra es viable, pero puede ser muy complicada», reconocieron los técnicos que durante los últimos tres meses han estado estudiando las profundidades de Vara de Rey a partir de las muestras de terreno que tomaron en siete sondeos.

Una de las características del aparcamiento, en caso de que finalmente se tomara la decisión de seguir adelante con la iniciativa, sería obligatoriamente su construcción como un departamento estanco, algo parecido a una piscina, para evitar las filtraciones de agua.

El primer teniente de alcalde y concejal de Gobernación, Pedro Campillo, que durante meses ha estado barajando la hipótesis de llevar adelante esta obra para solventar los problemas de aparcamiento del centro de Eivissa, señaló ayer que el equipo de gobierno tiene que estudiar el informe «detenidamente», hacer consultas y luego tomar una decisión.