Desde el pasado martes el Casino de Ibiza se ha convertido en una 'Ventana a Oriente'. La propia dirección del casino y la Galería Camaleón, con Adrián Gallo al frente, han bautizado a esta exposición de arte chino de esta manera englobando en su título el mensaje de esta actividad abierta a todo el público: acercar distintas manifestaciones artísticas de China a través de muestras pictóricas, escultóricas y de talla de jade de diferentes épocas dinásticas.

Concretamente, en la sala se encuentran objetos de coleccionista de la dinastía Qing, la última antes de la Revolución que reinó entre 1644 y 1911, entre los que destacan varios muebles como una cama de opio, un mueble con forma de mesa utilizado en la cultura china para tumbarse y fumar en pipa de porcelana, agua o bambú. Esta cama tallada a mano en cuatro tipos de madera diferentes recoge en sus relieves la historia del opio a través de cuatro demonios situados en sus cuatro esquinas.

Sillas plegables, un tablero de majong en porcelana y un mueble de farmacia, son otras de las piezas expuestas al público en esta muestra en la que lo más llamativo es la elegancia y acabado de todos los objetos expuestos.

Los ejemplos plásticos recogen una pequeña muestra de la colección de autores contemporáneos de la Escuela de Shangai, que incluye los ejercicios de los alumnos que copian a antiguos maestros.

Se trata de retratos de gran delicadeza en los que aparecen reflejadas hermosas jóvenes chinas en edad casadera o en escenas de interior, una modalidad de mucha tradición. Además de los óleos la sala cuenta con dos retratos pintados en papel de seda y una tapicería ancestror pintada perteneciente a la dinastía Chia Ching que reinó entre 1796 y 1850.