Numerosos vecinos acudieron al pleno extraordinario. Foto: V. FENOLLOSA.

El pleno extraordinario de la Corporación de Sant Josep rechazó ayer, con los votos en contra de los nueve concejales del Partido Popular, una moción del Pacte Progressista en la que se solicitaba reemprender las negociaciones con la Conselleria d'Educació para construir el centro educativo de Sant Agustí. La Comisión de Gobierno del Consistorio comunicó recientemente a Educació su negativa a firmar un convenio de colaboración que permitiese solucionar el problema de financiación de la obra, cuyo coste ronda los 750 millones de pesetas.

El concejal progresista Josep Marí Ribas Agustinet, arropado por los aplausos del público que abarrotaba la sala "entre el que se encontraban los alumnos del colegio Es Vedrà", trató de convencer al equipo de Gobierno de la bondad y conveniencia de firmar ese acuerdo. Expuso como razones a favor de aceptar el convenio el crecimiento de población experimentado en Sant Agustí desde 1990, cuyo porcentaje sobrepasa el del resto de parroquias del municipio; también esgrimió el texto del convenio con el ánimo de demostrar que, al contrario de lo que alegan los populares, la Corporación no se endeudará ni estará incapacitada para pedir más créditos. El concejal concluyó afirmando que para sacar adelante el instituto sólo es necesaria la «voluntad» del grupo popular.

El concejal de Hisenda, Francisco Tur Prats, señaló que «es consciente de las necesidades en materia educativa», pero reiteró la negativa del PP a firmar el convenio, ya que, ante todo, «se deben salvaguardar» los intereses municipales. Tur explicó que la Conselleria d'Educació es la única «competente» para llevar a cabo ese proyecto y, por tanto, el Consistorio se limitará a entregar los terrenos que se necesitan para la construcción, con sus infraestructuras listas.