Quizás resulte exagerado comparar el funcionamiento de un canal de televisión con el organismo humano, pero tratándose de una televisión local como la TEF, no lo es tanto. De hecho sus moradores, un equipo fijo formado por 12 personas, lo ven como algo cercano y dotado de vida en el que el control es el «corazón», el motor de funcionamiento para las emisiones, montaje y grabación, y el archivo, formado por cerca de 1.000 cintas, el «alma», lo que hace que el trabajo tan efímero para el espectador, perdure.

Aunque para el que ve los programas de elaboración propia del canal la duración de los mismos se reduzca a unos cuantos minutos, detrás de cada producción hay varias horas de trabajo.

El informativo, el programa estrella del canal, que se emite de lunes a viernes en directo, es un claro ejemplo de ello. Su media hora de duración esconde entre 5 y 6 horas de trabajo: «un plano de treinta segundos de emisión tiene una media de trabajo de grabación de unos 30 o 38 minutos», apunta Germán González uno de los redactores, quien explica que detrás de cada noticia hay un proceso de redacción, locución, grabación de voz en off, selección de declaraciones e imágenes, sonido ambiente y coordinación de todos elementos «hasta formar una de las ocho noticias que forman parte del informativo junto con los breves», añade Carlos Boch, uno de los operadores y técnicos de imagen.

Aunque el horario de programación de la TEF es de 14'00 a 02'00 horas, su plantilla trabaja desde las 10 de la mañana en distintos turnos centrando sus esfuerzos en el informativo de las 21'30 horas.