Los padres de los 18 niños que no han sido escolarizados en el Colegio Puig d'en Valls denunciaron ayer la desidia del delegado de Educaciò en Eivissa, Antoni Marí, con respecto a su problema ya que aseguran que se ha negado a recibirles en reiteradas ocasiones «con la única explicación de que no tiene nada más que decir sobre este tema y que no quiere saber nada de Puig d'en Valls».

Los padres aseguran que están sufriendo una situación «injusta», ya que han comprobado que se ha admitido a niños del municipio de Eivissa porque entran dentro de la zona de influencia de este centro, «mientras que otros pequeños que viven a pocos metros del colegio no han conseguido plaza», aseveran.

Por su parte, el Pacte Progressista de Santa Eulària ha mostrado su apoyo a los padres aunque ha solicitado una entrevista con el delegado de Educació «para conocer la versión de la otra parte y luego juzgar con más objetividad», señaló ayer su portavoz, Carlos Salinas. Otro de los objetivos de este encuentro es solicitar una entrevista para los padres «porque éstos se niegan a hablar con un inspector como sucedió la última vez que pidieron audiencia con Marí».

El portavoz del Pacte asistió a la última reunión de los padres, durante la que constataron denuncias como «la promesa de ofrecer 60 plazas para este centro, que finalmente quedaron en 40» o que el director del propio centro «no ha mostrado interés en buscar una solución al problema».