Durante los últimos meses se han revisado los equipos y se han introducido mejoras para evitar que algo pueda fallar.

El aeropuerto de Eivissa estará bien guardado la noche de fin de año. Un equipo de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (AENA) compuesto por alrededor de 25 personas se dará cita en la terminal unos minutos antes de las doce de la noche, con el objetivo de vigilar que todo funciona perfectamente después de las campanadas. El director del aeropuerto ibicenco, Gonzalo Aguarón, encabezará ese equipo de AENA que tendrá que tomar las uvas en el edificio y que también estará acompañado por miembros de las compañías aéreas, operadores de handling y otras empresas relacionadas con el aeropuerto que quieren vigilar de cerca que todo salga a la perfección.

Según explicó Aguarón, AENA ha puesto en marcha actuaciones en todos los aeropuertos del país y «todos ellos están preparados para este evento».
En el caso concreto de Eivissa, el trabajo para preparar el paso al nuevo milenio comenzó hace ya varios meses y ha significado imponer «un ritmo bastante intenso para preparar esta fecha», dice Aguarón.

Una vez al mes, responsables y técnicos de AENA se reúnen para revisar las acciones emprendidas hasta el momento y lo que todavía pueda quedar por hacer. A esta reunión también acuden las principales compañías que están relacionadas con la terminal y que por hacer uso de equipos informáticos pueden verse involucradas en posibles complicaciones relacionadas con el paso de 1999 al 2000. «Tenemos un plan de contingencia y también hemos formado una célula de contingencia, en la que están presentes personas tanto de AENA como representantes de las otras organizaciones. Se ha constituido hace unos días y nos reunimos una vez al mes para ir viendo los avances que se producen en la certificación de los equipos y para comprobar que todo funcione», señala el máximo responsable del aeropuerto pitiuso.