El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular, José María González Ortea, en su valoración de ayer ante los medios de comunicación de las medidas anunciadas por el Govern en materia de ordenación urbanística, vaticinó «una enorme indisciplina urbanística» en suelo rústico y criticó la vía de lectura única por la que se presentará este anteproyecto al Parlament.

Para el diputado popular, con el procedimiento de la lectura única, se anula la posibilidad de que el PP pueda discutir el proyecto en ponencia y comisión, y recordó que su partido representa al 45 por ciento de la población balear.

En opinión de González Ortea, el anteproyecto de ley de medidas cautelares y de emergencia para frenar la presión urbanística es una «ley de ordenación del territorio encubierta», al tiempo que «vulnera los principios de la Carta Europea de Ordenación del Territorio que requiere la máxima información y publicidad a la población afectada».

El portavoz adjunto del PP en la Cámara autonómica cree que la actuación del Ejecutivo responde a la actual presión de edificación en suelo rústico, la cual es el resultado de que «el Govern de izquierdas lleve dos meses atemorizando a la población diciendo que va a endurecer las condiciones de edificación».

Para el diputado del PP, estas medidas «ponen al ciudadano medio en una situación de indefensión», ya que admitió desconocer «si se trata de un anteproyecto o proyecto de ley, ni tampoco si estas medidas se volverán a discutir en Consell de Govern o si se remitirán en breve al Parlament».

González Ortea considera «más sensato» el mensaje de la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, en el que «en vez de atemorizar a la población, la tranquiliza, al decir que se mantendrá el criterio del PP en las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT) de los 14.000 metros como superficie mínima edificable en suelo rústico en Mallorca».