Resumen de las pequeñas secciones diarias de nuestro suplemento estival

Así que los periodistas "obligados cada día a llenar tropecientas páginas" nos hemos tenido que buscar otras serpientes de verano. Ahí van algunas:
"Ecotasa sí, ecotasa no: Nadie sabe exactamente qué es (al igual que la desestacionalización), pero tiene un nombre realmente sonoro.
"Las pensiones: Subirlas o no subirlas, esa es la cuestión. Ya han sido ganas de discutir, puesto que no se tocarán hasta el invierno. En fin, ha sido lo que los políticos llaman debate social.

"La muerte de Hassan: Tuvo que morir para que muchos se enteraran de que estuvo vivo y que, además, fue rey.
"El fichaje de Anelka: Llegó a aburrir a las ostras. El Real Madrid se gastó tanto dinero como el PIB de algunos pequeños países para contratar a un jugador.

La sección estival
Comenzaron su presentación el primer día de julio con una entrevista imposible (arduo trabajo para periodistas que diariamente tratan de sacar algo medianamente coherente de comunicados, ruedas de prensa, descalificaciones, desmentidos o rumores). Tenían ánimos y la rabia de la juventud por hacerlo bien (la media de edad no superaba los veinte años y en cuanto a madurez ni hablamos) pero sobre todo, muchas ganas de hacerlo bien. El resultado han de encontrarlo en un balneario (preguntar por Ibarrondo), una clínica de desintoxicación (negocios aparte de Martínez) o farmacias (Ribas lo sabe todo de calmantes) o si prefiere torturarse aún más, acuda a una hemeroteca. Y es que, guardias de aeropuerto; un sol injusto en la cabeza por cubrir campamentos infantiles o escuelas de verano; conciertos, fiestas nocturnas o reuniones en la playa, no podían terminar de otra forma. Llegaron al final y como cualquiera que consigue llegar hasta la meta, satisfechos pero con un «se puede mejorar». No obstante, el único jurado que cuenta son ustedes. Menos mal que aquí no hay pena capital.

Periodistas para largo...
Llegan a esta página las últimas líneas del perfil del verano 1999. Han sido casi setenta días compartiendo con ustedes este humilde espacio que otorga la prensa diaria. Un espacio en el que se han juntado, por casualidad, personajes y sentimientos propios y ajenos. Figuras que se han dejado ver por el caluroso verano ibicenco. Guapos, ricos, famosos, marujas, jetas, carcas, desposeídos, poderosos y así podríamos seguir hasta mañana. Pero ésta es la última columna descriptiva del verano.

Escribir de un adiós nunca es fácil. Por eso, tómense ustedes esta columna como un hasta luego lleno de ternura y recuerdo. Recuerdos de momentos agudos metiéndonos con los que molestaban a la gente corriente. O que simplemente llamaban la atención al resto por su forma de vestir, por sus actitudes públicas o por su descaro desproporcionado. Las plumas que han untado de gracia esta columna son jóvenes. Principiantes en este oficio del escribir para transmitir algo. No es fácil. Pero lo hemos intentado y seguiremos adelante pase lo que pase. Diciendo lo que queremos decir, sin tapujos, hablando claro y alto, que para eso sirve el perfil. Aguarden aquí hasta el año próximo. Seguro que volvemos, quizá no los mismos pero siempre: periodistas. ¡Va por ustedes!