La decena de actrices que conforman el grupo de teatro de Es Vedrà -dirigido por Guisante- se atropellan a la hora de explicar el argumento de la obra «El Ganso de oro» que están interpretando.El libreto, que presentarán en la próxima edición de «El Festín» está basada en uno de los muchos cuentos infantiles que escribieron los Hermanos Grimm, «Pulgarcito». «El ganso de oro» narra, en líneas generales, las aventuras y desventuras de Bobalicón el hijo tonto, pero bueno, de una modesta familia que pretende casarse con la princesa del reino, teniendo que superar con éxito las múltiples pruebas que le impone -con cierta mala leche- el padre de la misma.

Elisa, quien interpreta a Bobalicón, comenta que el éxito del personaje reside en que «consigue hacer reír a la princesa -con la ayuda de un ganso- y que es bueno». «Sí -asegura la princesa, interpretada por Yasmin- yo estoy triste hasta que la gente empieza a quedarse pegada al ganso. Eso me hace reír».

BOBALICÓN Y LA PRINCESA
Bobalicón y la princesa se han conocido, pero tendrán que enfrentarse al mal genio del rey: «Para poder casarse con la princesa le impongo tres pruebas muy difíciles -comenta Laia-. En la primera debe beberse muchísimos barriles de vino, hasta que queda completamente hinchado. En la segunda, debe comerse todo el pan que cabe en tres camiones y, por último, tiene que traerme un barco». Bobalicón, por supuesto, supera todas la pruebas, algo que no podría haber hecho sin la ayuda de Laia, quien interpreta a un viejo con ciertos poderes mágicos: «Le ayudo porque es simpático y es el único de todos los hermanos que me ayuda cuando me encuentran hambriento en el bosque. Bobalicón es el único que me da de comer».