El equipo de gobierno de Formentera, en una foto en diciembre cuando se hizo la moción de censura a Córdoba. | Alejandro Mellon

El Consell de Formentera trasladará esta semana al Govern balear su pretensión de iniciar los trámites para la devolución de las competencias en materia de menores, según han señalado fuentes de la institución. La consellera insular de Asuntos Sociales, Cristina Costa, informará esta misma semana a la titular autonómica del área, Catalina Cirer, del acuerdo al respecto adoptado por el Pleno formenterés el pasado 29 de noviembre, han indicado las mismas fuentes.

El Consell formenterés tutela en estos momentos un centenar de menores extranjeros no acompañados. «La mayoría están en diferentes centros de Mallorca», han explicado desde la institución insular, «en Formentera hay unos 15». Para 2024, el Consell destinó una partida de cerca de un millón de euros para poder afrontar el cada vez más elevado número de tutelas de menores, provocado por la avalancha de pateras llegadas desde Argelia a la isla. Una cantidad de dinero que no ha sido suficiente para poder afrontar la situación.

Al elevado gasto económico se suma que Formentera carece de instalaciones para prestar este servicio. Por ello, y a propuesta de Sa Unió, el Pleno insular aprobó en noviembre, con el voto a favor del entonces presidente, Llorenç Córdoba, y las abstenciones de GxF y el PSOE, la devolución de las competencias a la Comunidad Autónoma. En su propuesta, Sa Unió dejó claro que, con un presupuesto total anual de unos 40 millones de euros, el Consell no puede hacerse cargo de los gastos que supone afrontar la tutela de los menores extranjeros no acompañados. «La situación económica y social para Formentera es poco sostenible», dijo el entonces portavoz de Sa Unió, José Alcaraz, que añadió que es «imposible de gestionar» este problema si se debe dedicar al mismo más dinero anualmente. «Queremos un buen futuro para estos chicos y que se queden en España», añadió Alcaraz, «pero en otro sitio donde estén en mejores condiciones».

Llorenç Córdoba, por su parte, reconoció que devolver las competencias a la Comunidad Autónoma «no es un tema fácil». Pero también explicó en aquella sesión que, si los menores extranjeros no acompañados que llegan a Formentera fueran repartidos por todo el archipiélago, la isla solo tendría que asumir la tutela de cuatro.

Desde GxF, Alejandra Ferrer definió el problema como «muy complicado» y pidió que el Consell busque la manera de retornar al Govern solo la competencia relativa a la tutela de estos menores extranjeros no acompañados. Además, se mostró también partidaria del reparto de esta responsabilidad entre todas las islas porque, explicó, mientras Formentera gestiona la tutela de un centenar de menores, en Menorca solo se han acogido a dos.

El socialista Rafa Ramírez indicó, finalmente, que tutelar a estos chavales es una cuestión de «derechos humanos». Pero también admitió que la situación del Consell formenterés en este sentido es «muy complicada». El PSOE defendió en aquel momento la posibilidad de que la institución insular pidiera ayuda económica al Govern para poder afrontar la situación e instó a Córdoba a que, en su condición de diputado por Formentera, presentara una enmienda a los Presupuestos baleares en este sentido. Algo que Sa Unió no aceptó.