Exterior del Consell de Formentera. | Moisés Copa

Los consellers de GxF y el PSOE han ofrecido este jueves a Sa Unió apoyar un gobierno insular en minoría. Eso sí, la condición para este apoyo pasa por la dimisión del actual portavoz de la coalición y uno de sus líderes, José Alcaraz. Una dimisión que, de momento, no parece que vaya a producirse a tenor de la respuesta que ha ofrecido el conseller Javier Serra a la oferta durante la celebración del Pleno extraordinario en el Consell de Formentera.

La propuesta, que tanto GxF como el PSOE han calificado de «generosa», ha sido presentada tras conocerse el contenido del informe elaborado por la comisión de seguimiento del Código Ético del Consell sobre la crisis institucional que comenzó a finales de noviembre de 2023 y que se ha saldado con graves consecuencias para la institución pues ahora mismo el Gobierno insular está en manos únicamente del presidente Córdoba y del conseller Artal Mayans, tras la decisión de los otros siete representantes de Sa Unió de abandonar el equipo el pasado verano.

La líder de GxF, Alejandra Ferrer ha explicado que tanto Córdoba como Sa Unió han de asumir la responsabilidad en la crisis institucional. Por ello, ha «ofrecido» al presidente que dimita y que «lo haga con dignidad». Petición que también ha dirigido hacia Sa Unió al afirmar que, una vez estudien el contenido del informe de la comisión de seguimiento del Código Ético, exigirán «responsabilidades políticas». Un mensaje claramente dirigido a Alcaraz. Así, si este dimite, GxF y el PSOE, ha añadido, «comenzarán a trabajar en una propuesta que permita un gobierno en minoría de Sa Unió».

«Somos una oposición responsable», ha asegurado la líder de GxF, «esta es la tercera propuesta que presentamos y les muy generosa porque ninguno de nosotros tiene como idea dar el gobierno a la derecha».

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Más contundente, si cabe, ha sido el portavoz del PSOE, Rafa Ramirez, que ha exigido también a Córdoba su dimisión porque, ha advertido, es la única «salida digna» que le queda tras «haberse cargado el prestigio del Consell». Ramírez ha insistido en el presidente ha de dimitir «por dignidad y generosidad». El socialista también ha reclamado a Sa Unió la asunción de responsabilidades en la crisis pues, ha recordado, fue la coalición la que eligió a Córdoba como número uno. Y, al igual que Ferrer, ha señalado que si Sa Unió asume estas responsabilidades, es decir, si prescinde de José Alcaraz, «tendrá el apoyo de la izquierda para una moción». Algo que, ha añadido, no gusta a los socialistas porque estos no creen en las políticas de la coalición a la que, ademas, consideran «parte del problema y no la solución». «Pero con todo el dolor de corazón», ha insistido, «la izquierda hará el esfuerzo necesario para que la institución siga siendo un Consell Insular».

A esta oferta ha respondido por parte de Sa Unió el conseller Javier Serra ante el silencio de Alcaraz. Serra ha asegurado que en esta crisis la responsabilidad ha de repartirse entre todos los grupos pues, ha recordado, Sa Unió denunció ya en noviembre de 2023 los problemas con Córdoba y, desde entonces, ha venido pidiendo apoyo a la oposición para poder presentar una moción de censura contra el presidente sin que GxF y el PSOE hayan realmente querido ayudar. De este modo, Serra ha evitado pronuciarse directamente sobre una posible dimisión de Alcaraz pero, a tenor de lo dicho, no parece que esta vaya a producirse de momento.

Serra, al igual que GxF y el PSOE y con el informe de la comisión de seguimiento del Código Ético en la mano, ha exigido también a Córdoba que dimita y ha insistido en que no es lógico que la oposición pida «responsabilidades a los que han denunciado esto». Por ello, ha ofrecido a ambos grupos «hablar» y «asumir todos la responsabilidad»: «Sentémonos todos antes de pedir responsabilidad política a los que han denunciado estos hechos».

Llorenç Córdoba, por su parte, ha dejado claro que no tiene previsto dimitir y ha señalado que la reacción de los tres grupos ya la avanzó él mismo semanas atrás cuando aseguró que esperarían a la presentación del informe de la comisión de seguimiento del Código Ético para evidenciar algún tipo de acuerdo que permitiera desalojarle de la presidencia del Consell.