La transición energética ya es una realidad en Sant Antoni

Redeia colaborará con un importe máximo de 40.000 euros en el proyecto

El IBE y Redeia ponen en marcha un convenio para desarrollar un programa educativo para la transición energética.

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La transición energética ya es una realidad en el municipio de Sant Antoni. Desde septiembre del año pasado, la cubierta del CEIP Cervantes tiene la primera instalación de autoconsumo renovable colectivo público de Ibiza.

La iniciativa, impulsada por Redeia y el Institut Balear de la Energía (IBE) suministra energía limpia a 36 hogares, dos colegios, tres pequeñas empresas y varios servicios municipales, además de luchar contra la pobreza energética. Cinco familias vulnerables, seleccionadas por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Sant Antoni, se benefician de esta energía sin coste alguno, gracias a la financiación de Redeia.

Este jueves se celebró un acto en el Ayuntamiento, donde el alcalde Marcos Serra expresó su satisfacción por la instalación de 100 kW de potencia gracias a la colaboración con IBE y Redeia. «Estamos contentos porque también es un trabajo que se hace debe los servicios sociales del Ayuntamiento», afirmó.

Por su parte, Hernando Rayo, gerente del IBE, destacó la importancia de acercar la transición energética a los centros educativos. «Estamos muy satisfechos con esta puesta en servicio, porque no solo generamos energía limpia, sino que educamos a los más pequeños sobre sostenibilidad y energías renovables», aseguró.

Eduardo Maynau, delegado de Redeia en Illes Balears, resaltó el carácter didáctico y social del proyecto: «Muchas veces la gente no sabe de dónde viene la electricidad, porque no llega una factura nuestra a casa. Con esta instalación fotovoltaica en el colegio, los niños pueden ver y entender el origen de la energía de manera tangible».

Carlos Gómez, director del CEIP Cervantes, hizo hincapié en el valor pedagógico de la iniciativa: «Desde hace años trabajamos en energías renovables, pero ahora los alumnos pueden vivirlo de manera práctica y directa. Es una forma inmejorable de aprender sobre sostenibilidad».

El programa educativo asociado al proyecto se desarrolla a lo largo de los cursos 2024-2025 y 2025-2026, con sesiones adaptadas a cada ciclo formativo. Los más pequeños ya conocen al profesor Molécula y ayudan a Voltio a evitar el derroche energético, mientras que los alumnos de Primaria manejan kits de autoconsumo.

Además, la instalación fotovoltaica del CEIP Cervantes genera 150.000 kWh anuales, evitando la emisión de 67 toneladas de CO2 cada año. Además, las familias y empresas que participan ahorran entre un 30% y un 50% en sus facturas.