Juan Magán se hace de rogar y no sale al escenario del Port de Sant Miquel hasta llenar aforo. | Alejandro Mellon

Cientos de personas han asistido este sábado a la primera edición del San Miguel’s Day, uno de los festivales de música más esperados en la isla que pone el broche final a este verano cargado de eventos. Aunque la llegada de los asistentes fue bastante progresiva a este gran show, sobre las 20.30 horas la playa del Port de Sant Miquel ya albergaba cerca de 2.000 personas, cuando la capacidad máxima de la playa para el festival era de 3.500 asistentes. No obstante, el artista catalán Juan Magán optó por esperar a que llegara más gente al espectáculo antes de salir al escenario. En total, se retrasó cerca de una hora ante la desesperación de varios espectadores. «No entendemos nada; todavía tienen que actuar los artistas Carlos Jean y Carmen de la Fuente», apuntó uno de los presentes algo impaciente, mientras su amigo hablaba sobre la organización del show. «Yo creo que mejor así. Lo de instalar una plataforma flotante en el agua era algo un poco descabellado, además no tenían los permisos necesarios», subrayó Carlos, uno de los asistentes, haciendo referencia a la empresa organizadora del evento Cervezas San Miguel.

Cabe recordar que esta compañía cervecera tenía previsto instalar dicha plataforma en el mar y otros elementos, pero descartó estas infraestructuras tras ser advertida por los técnicos de medioambiente del Ayuntamiento de Sant Joan de que había alerta amarilla por viento y olas. Antes de que tuviese lugar este retraso en el festival protagonizado por Juan Magán, los ibicencos Morning Drivers ya habían inaugurado este evento a partir de las 18:30 horas. Con su canción ‘No todo tiene un final’, los asistentes comenzaron a animarse y a consumir más bebidas, incluso se había habilitado en la playa una barra de cócteles, además de las dos barras laterales. También había varios encargados de controlar el aforo del evento, que estaba limitado a 3.500 personas. No obstante, varios de los presentes destacaron a Periódico de Ibiza y Formentera que tuvieron ciertos problemas a la hora de recibir el código QR tras realizar previamente la reserva de las entradas por Internet. También indicaron que, para este evento, la empresa había utilizado un sistema cashless para eliminar la necesidad de utilizar efectivo en el festival. «Puedo recargar mi pulsera las veces que lo necesite desde el móvil y si me sobra saldo, que no creo, me lo devuelven», subrayó Felipe entre risas antes de acercarse a los food trucks instalados en la playa. Desde comida local, asiática y americana hasta gastronomía latina y mediterránea. Una variedad gastronómica para todos los asistentes a este evento de «gran envergadura y único en su formato».

De esta manera lo anunciaron desde la empresa Cervezas San Miguel, añadiendo que el nuevo festival promete una experiencia de más de siete horas de música en vivo con artistas de renombre. «Tenemos ganas de ver a Juan Magán porque lo seguimos desde que somos pequeñas», señaló Adriana, una vecina de Sant Miquel. En ese momento el frío y el viento ya se hacía notar en el Port de Sant Miquel. Pasaron los minutos y, finalmente, el artista de Badalona subió al escenario ante cientos de personas que bailaron y cantaron sus canciones populares como ‘Bailando por ahí’ o ‘Ella no sigue modas’. Durante este espectáculo había en esta playa más de 2.000 personas, más de la mitad del aforo máximo. En este sentido, muchos de los asistentes comentaron que a este festival no le faltó de nada, ya que apostó por la sostenibilidad y no se utilizaron materiales no reciclables, además se instalaron todo tipo de contenedores. También se habilitó ayer un ‘Punto Violeta’, con el objetivo de garantizar un festival libre de violencia, y se dispuso de un servicio ida y vuelta de bus lanzadera gratuito con el que los asistentes pudieron ir desde Ibiza, Sant Joan y Sant Miquel hasta el Port de Sant Miquel y disfrutar de este festival hasta la madrugada.