Un momento de la presentación. | Irene Arango

Sa Nostra Sala acogió este viernes la presentación del primer libro de la escritora Rosario Salazar, ‘Un fluir de sentimientos’, una obra que recopila las vivencias y emociones de la artista expresadas en forma de poesía.

En este sentido, Salazar afirmó que, aunque siempre había sentido pasión por la escritura «desde niña», fue una situación familiar la que desencadenó su autentica vocación literaria. «De pequeña y de jovencita siempre he escrito cosas pero empecé realmente a sentir que me gustaba escribir cuando nació mi sobrino con parálisis cerebral», relató. En ese momento, la necesidad de comunicarle a su sobrino «tantas cosas» la llevó a escribir una carta que, más tarde, transformó en una canción que ella misma interpretó el día del bautizo, acompañada de su hijo al clarinete. «En ese momento me di cuenta de que escribir era mi refugio», confesó Salazar.

El libro ‘Un fluir de sentimientos’ es una manifestación de las emociones más íntimas de la artista. Una pasión que tomó más fuerza que nunca durante los meses de pandemia como forma de evitar la soledad. «La poesía siempre me ha ayudado a expresar lo que siento», señaló la autora.

Asimismo, tal y como señala, para la publicación de este primer libro tuvo mucha influencia un certamen de poesía en Málaga, donde Salazar se presentó con una poesía dedicada a su difunto marido. Para su «sorpresa», ganó el segundo premio, lo que la motivó a seguir escribiendo más poesía. «Ese premio me dio alas», comentó emocionada, señalando también el apoyo de sus amigas, quienes la alentaron a publicar finalmente su primera obra.

Durante la presentación, Rosario Salazar destacó la importancia de la poesía en su vida y lamentó que este género literario esté, como asegura, «un poco olvidado». Sin embargo, animó a los jóvenes que sienten la necesidad de escribir a que lo hagan. «El consejo que les daría es que cojan un lápiz y una hoja, y escriban todo lo que quieren expresar. A mi, me ha ayudado mucho. Que escriba y que lo tenga ahí y que, de vez en cuando, coja y lea», apuntó la escritora.

Aunque «todavía no piensa» en proyectos futuros, Rosario Salazar dejó la puerta abierta a la posibilidad de seguir escribiendo. «De momento estoy viendo a ver qué acogida tiene. Un libro de poesía no se hace muy largo, es más selecto, y claro que podría escribir otro (libro)«, dijo Salazar, puntualizando que sus intereses no son económicos.