Un momento del Eivissa Jazz de este martes por la noche. | Toni Planells

El Mercat Vell de Vila acogió este martes la apertura de la edición de este año del Eivissa Jazz con una muestra del futuro.

Los responsables de dar el tono al arranque del festival fueron los miembros del Combo CSMIB, un quinteto de alumnos recién licenciados del Conservatori Superior de Música de les Illes Balears que, a partir de las 21 horas, inundaron los pies de las murallas con un intenso repertorio.

Un repertorio que arrancó con sonidos brasileños y que recorrió algunos estándares del jazz, además de boleros y de sorpresas en forma de arreglos de algunos temas más atrevidos como el de la banda sonora del videojuego Súper Mario que preparó Pere M. Molina, responsable de saxofón alto. Tampoco faltaron composiciones propias como con la que Sinéad Cormican, responsable de la voz y del violín en el quinteto, emocionó al público que abarrotó los alrededores del Mercat Vell. Denis Gridchin al contrabajo, Goran Levi a la guitarra y Antoni Frontera tras la batería completaron el quinteto que demostró con creces que el género del jazz goza de una juventud y futuro de hierro.

Con este concierto, el Conservatori Superior de Música de les Illes Balears puso en marcha el festival que, este miércoles se traslada al parque Reina Sofía con el concierto de la Big Band Ciutat d’Eivissa y el esperado recital del Barbé Group. Èlia Bastida e Irene Reig con The Bob Collective serán quienes trasladarán el Eivissa Jazz al Baluart de Santa Llúcia el jueves 5 para dejar paso al quinteto de Pepe Zaragoza y a la Eivissa Jazz Experience de Abe Rábade el viernes 6. En el mismo escenario llegará el plato fuerte del festival el sábado 7, cuando la leyenda viva del Jazz, Paquito d’Rivera y su quinteto pondrán un punto y final al festival que promete ser histórico.