Félix Bolaños. | Europa Press - Mateo Lanzuela

En esta dictablanda que nos están colando por la puerta de atrás y sin que el grueso de la ciudadanía, lo que antes llamaban «masa», sea capaz de reaccionar, el PSOE va dando pasos cada vez más alarmantes. La última ocurrencia ha sido la de pretender modificar el sistema para limitar muy mucho la acusación popular. Así, serán solo los fiscales, que ya sabemos de quién dependen, los que afinen las cosas en las salas de juicios.

El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha dicho que hay que regular esta figura porque «en este momento es una feria de ultras con ganas de publicitarse». Al margen de que todo este tinglado se monta para que Sánchez y su tropa no se vean obligados a sentarse en el banquillo, la frase es muy descriptiva si la aplicamos a lo que está sucediendo en Ibiza en particular y en Baleares en general. Solo a una «feria de ultras con ganas de publicitarse» se le pudo ocurrir estrujar la ley de forma torticera para llevar a los tribunales a Vicent Marí por el no caso de La vida islados. Y solo los ultras de una feria llevarían a los mismos tribunales la nueva norma que permite regularizar en rústico todo aquello que ya ha prescrito. Alguien debería avisar al ministro de que en las Islas los ultras llevan pin del PSOE.

PD.- Si aún no lo han hecho, háganse un favor, quítense los prejuicios y escuchen con atención el nuevo disco de Bad Bunny. Benito ha logrado, mezclando lo nuevo y lo de siempre, llevar a todo el planeta la esencia de Puerto Rico y, lo más importante, creando eso que llaman «conciencia social». No tiene ni un solo tema malo, al contrario, son todos redondos. Y algunos de ellos muy aplicables a Ibiza y Formentera: Baile inolvidable, Lo que le pasó a Hawaii y Turista.

No, no suelte la bandera, ni olvide el lelolai…